Todo estaba perfecto hasta que sentí una mezcla de sensaciones no ajenas a mi y que lamentablemente me trajo muchos recuerdos, todos malos. Empece a sudar frío y a tener muchas nauseas, empece a sentir eso en el pecho, eso llamado ansiedad y solo quería huir, en realidad no sabía muy bien lo que quería, yo le decía a mi mente que no podía volver atrás, que ya lo había logrado y que no deseaba esto otra vez, creo que lloraba por que tenía miedo que todo vuelva, que toda esa época que viví bajo tinieblas regrese y pensaba en que quizá no iba a poder soportarlo de nuevo.
Empece a orar y a rezar mucho por que de esa forma me siento tranquila, también empece a hacer un poco de yoga y a respirar profundamente y decidí salir y pensar que todo estaba bien, intentaba pensar en otras cosas ( pero que horrible la mente o mi mente que no deja de pensar en cosas buenas y malas) la noche paso y al otro día desayune todo estaba bien, todo estuvo bien pero tenía resagos de ansiedad aun en mi cuerpo. Cuando llegue a Cajamarca hiper mareada después de un viaje terrible por las 300 mil vueltas y curvas que tenía el camino, solo no quería comer y solo tenía ansiedad nuevamente ( la odio). Intentaba luchar contra mis pensamientos e intentaba sentirme mejor y pensar bonito y disfrutar del momento que estaba pasando y así fue, todo paso, llegue a misa con muchas ganas de escuchar y de conversar con Dios y la Virgen, solo llore mucho, era un sollozo de desesperación, de recuerdo ( por que hace dos años estuve en esa misma iglesia con una crisis terrible de ansiedad pidiéndole que me ayude) y fue en ese momento que sentí paz y tranquilidad, entendí que debo ser agradecida por que ya no siento lo que sentía antes, ahora soy una mujer sana y llena de vida, solo me toco una pequeña crisis, esas a las que no estoy a salvo de volver a sentirlas pero ya se que debo controlarlas y seguir trabajando en ello, en aprender a controlar la ansiedad, acepto que soy vulnerable a ello y que puedo volver a sentirlo pero todo depende de mi en como controlarlo y así será.
